Lo más habitual cuando tiene lugar un accidente es que
nuestra primera reacción sea de ponernos nerviosos, por lo que tendemos a
perder el control de la situación, lo cual no nos conviene lo más mínimo cuando
lo que precisamente queremos es poder solucionar los imprevistos que nos surjan.
Dicho esto, está claro que lo primero que debemos hacer ante un accidente es
tranquilizarnos a nosotros mismos antes de intentar ayudar a los demás, para
así poder actuar correctamente ante cualquier circunstancia.
Una vez hecho esto los pasos a seguir serán los siguientes:
1º Tranquilizar a las víctimas: la atención
psicológica es fundamental y en muchos casos disminuirá o evitará situaciones
en las que los propios accidentados se pondrían en riesgo a si mismos. De modo
que debemos:
- · Profundizar en los sentimientos del asistido y averiguar las dimensiones de su problema, ya que el individuo estará en situación de estrés (preparado para situaciones de acción) y esto puede desencadenar en el distrés, que se trata de un estrés que excede sus niveles normales y puede llevar a un estado perjudicial con síndromes como: psicosis o cuadros de epilepsia.
- · Establecer una relación de la víctima con el auxiliador mediante nuestras habilidades sociales que incluirán la comunicación verbal, no verbal y paraverbal. Realizaremos una escucha activa con calma y libre de prejuicios y demostraremos capacidad para contener las situaciones, empatía con la otra persona y autocrítica.
2º Valoración de las víctimas: así determinaremos su
estado de salud y las atenderemos siguiendo unas prioridades marcadas. Esta
valoración se dividirá en las siguientes fases:
- · Exploración inicial: vamos a determinar sus constantes vitales (respiración, frecuencia cardíaca, pulso –medido en carótida- y temperatura –puede llegar a 35º en estado de shock-).
- · Exploración neurológica: mediante una escala llamada AVDN gracias a la que determinamos si el asistido está consciente o inconsciente. Si el paciente:
-Responde a estímulos físicos_ Consciente
-Responde a estímulos verbales _ Consciente
-Responde a estímulos dolorosos _
Inconsciente
-No responde _ Inconsciente
Además de esto existe el protocolo ACERCARSE, que se trata
de una interacción con la víctima en 8 etapas donde se organizan los primeros
auxilios:
- 1. Contextualización de suceso que ha ocurrido.
- 2. Contacto mediante comunicación no verbal.
- 3. Evaluación: exploración inicial, estilo de afrontamiento, identificar problemas.
- 4. Restablecimiento emocional: mediante una escucha activa.
- 5. Comprensión de la crisis: proporcionar información sobre nuestra actuación.
- 6. Activación: recuperar procesamiento cognitivo, plan de actuación.
- 7. Recuperación del funcionamiento: actividades en compañía.
- 8. Seguimiento: plantearse que se debe hacer a corto-medio plazo.
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